Sobre el recambio generacional

31 Ene
Joan Escarrabill

El día antes de cumplir 65 años, el mes de noviembre pasado, subí los 238 peldaños de la pirámide del sol en Teotihuacan (cerca de México DF). Subí con sólo un breve descanso a medio camino. En la cima tenía disnea pero podía mantener una conversación sin problemas. Bajé de espalda y sujetándome a la cuerda porque la rodilla izquierda no me permitió un descenso convencional, de frente, pero bajé. Los seres humanos tenemos tendencia a fijar hitos temporales de forma arbitraria. Fijar la mayoría de edad a los 18 años no tiene nada que ver con la madurez de las personas. Y tampoco te haces mayor a los 65 años. Para entender esto de «hacerse mayor» quizá sería más objetivo recordar, por ejemplo, «el primer día que”…

  • ..un médico residente o un estudiante te tratan de usted.
  • …un desconocido, por la calle, te identifica como un «señor».
  • …una persona joven te deja sentar en el metro o en el autobús.
  • …encuentras un libro en una librería de viejo y te das cuenta que tienes uno igual, comprado hace muchos años (y recuerdas perfectamente cuándo y dónde lo compraste).
  • …eres consciente que ya no puedes correr.
  • …dejas pasar el autobús o no bajas corriendo las escaleras del metro.
  • …buscas la barandilla para bajar una escalera.
  • …recibes una carta del Ayuntamiento diciéndote que ya eres candidato a la «tarjeta rosa».
  • …en una reunión profesional te preguntan directamente cuánto tiempo te falta para jubilarte.
  • …valoran tu presentación porque conoces bien la historia del problema.
  • …o te dicen que la barba te hace mayor.

Todo esto no te pasa a los 65 años. Todo esto te va pasando paulatinamente, de forma irreversible. Es la biología. Y peor los que no llegan.

Por todo ello la jubilación a los 65 años es una convención sin ninguna lógica que la justifique. Hay gente que espera la jubilación con ansia para poder hacer «las cosas que le gustan”. No entiendo demasiado esto de la jubilación. Quizá no entiendo la jubilación con una fecha fija (como la fecha de caducidad). En cualquier caso no veo la necesidad de jubilarme para hacer otras cosas porque me gusta mucho lo que hago.

Una cosa muy diferente es rechazar la jubilación para mantener el monopolio del espacio, del tiempo y de las ideas. El recambio generacional es imprescindible. Con los años todos tendemos a la estabilidad y Darwin nos enseñó que los sistemas cuanto más estables menos posibilidades de supervivencia tienen. Un sistema estable tiene poca variabilidad y, por tanto, poca capacidad de respuesta a las situaciones nuevas. La poca capacidad de respuesta impide la adaptación y, por tanto, te lleva al futuro de los dinosaurios.

Es mucho más importante hablar del recambio generacional que de la jubilación. Algunas ideas clave, según mi parecer:

  1. Ninguna generación tiene derecho a prescribir la forma de vivir a sus sucesores. Cada generación tiene el derecho (y la obligación) de vivir como le parezca.
  2. Ninguna generación tiene derecho a dejar el espacio que ha ocupado de forma que impida que las generaciones sucesivas lo diseñen como mejor les parezca.
  3. Ninguna generación tiene derecho a exigir que las generaciones sucesivas corran a su ritmo. Cada uno puede correr a la velocidad que le parezca, pero llega un momento que las generaciones que tenemos más pasado que futuro no podemos monopolizar el tercer carril de la autopista.
  4. No es necesario plantear la jubilación «a fecha fija» pero hay que tener bien claro que la evolución natural te lleva hacia la invisibilidad progresiva.
  5. La experiencia NO genera conocimiento. La experiencia es muy útil para identificar patrones más de prisa, para incrementar la “cartera de soluciones”, o para hacer con precisión tareas repetitivas (aunque las máquinas pronto nos ganarán en todo esto). Aquello que genera conocimiento es la curiosidad, el pensamiento crítico y picar piedra (picar mucha piedra), es decir, la perseverancia.
  6. Cada generación tiene la obligación de explicar qué ha hecho y por qué lo ha hecho. Y exponerlo a la consideración general. Esto se tiene que hacer no por esperar el reconomiento sinó para poder ser interpelado, para ayudar a aprender de los errores y para evitar que otros hagan reiteraciones innecesarias.
  7. Naturalmente, ninguna generación tiene el derecho de definir la agenda del recambio generacional que han de seguir sus sucesores. Opinar con espíritu crítico, siempre. Pero prescribir el itinerario, a partir de la experiencia, es un flaco favor al recambio generacional.

Todo esto no es una justificación para la parálisis. En este proceso siempre hay retos. Siempre es posible encontrar “océanos azules” para navegar en ellos. Joaquim Ma Puyal ha vuelto a la radio. No lo he escuchado ningún día, pero he leído unas declaraciones en las que afirmaba «a mi edad un reto es un lujo». En cualquier momento podemos (hemos de) buscar retos, pero teniendo en cuenta las reglas del juego.

Un amigo mío, Josep Ma Monguet, me explicaba que fue a visitar un amigo suyo, muy enfermo. Dice que el hombre, ahora enfermo, siempre había sido muy activo. Cuando lo vio, mi amigo le dijo, usando un estereotipo: «Y ahora, ¿qué haces?». «Pienso conceptos», le contestó. Al fin y al cabo, es una suerte poder seguir «pensando conceptos».

Post elaborado por Joan Escarrabill (@jescarrabill)

¿Damos un paso más? IMIM e IDIBELL ponen el paciente en el centro de la investigación

24 Ene
Maite Solans Domènech

Los estudios de evaluación del impacto de la investigación demuestran que para conseguir más impacto en la sociedad, un factor importante es la participación de las ‘personas que pueden aportar valor’. Lo que nos demuestran estos estudios es que hacer participar actores clave a lo largo del proceso de investigación puede mejorar la eficacia de su aplicación y el impacto en la sociedad. En la Jornada que AQuAS organizó sobre Participació en Recerca el passat 4 d’abril, Derek Stewart, molt implicat amb el Patient and Public Involvement and Engagement  del NIHR Nottingham Biomedical Research Centre, ens va explicar que la participació aporta diferents perspectives a la recerca. A més a més, deia en Derek Stewart, “mentre que el pacient té l’oportunitat de configurar el futur i donar sentit a allò que li passa en el seu dia a dia, l’investigador té l’oportunitat de legitimar el que fa, i donar visibilitat als seus resultats”.

I què hem aprés de tot això? En primer lloc, que hi ha una diversitat quant a participació en recerca, amb una gran varietat de formes d’interacció inserides en diferents nivells del procés de recerca. En segon lloc, que tot i les idiosincràsies de cadascun, cal una aproximació global i compartida per evitar contradiccions i aprofitar un aprenentatge mutu. I en tercer lloc, que cal un compromís per part dels diferents instituts i de la comunitat investigadora que afavoreixin la participació en recerca i l’impacte en la societat. Per aquest motiu, s’ha creat el Grup de Treball sobre Participació en Recerca (#SomRecerca), on sota la coordinació inicial d’AQuAS, diferents instituts d’investigació sanitària s’han agrupat per tal de promoure accions, agents o estratègies que facilitin la participació i que promoguin més sensibilització a la comunitat investigadora. Els principis que acompanyen aquest grup estan basats en el suport mutu i l’acceptació de la diversitat i diferents realitats de cada context.

El primer pas d’aquest grup ha estat la realització de  jornades en dos dels instituts (IMIM i IDIBELL) els passats 21 i 22 de gener. Sota el títol de Fem un pas més? Posant el pacient al centre de la recerca. Aquestes jornades han estat una bona oportunitat per presentar experiències que ja s’estaven fent, dins de la mateixa institució i que posen el pacient al centre de la recerca.

Les jornades han fet valdre l’esforç de diferents experiències que parteixen de motivacions individuals, bé dels investigadors o bé dels mateixos usuaris, i que han resultat inspiradores com a exemples de per on es pot començar. En aquestes experiències s’ha posat el pacient al centre de la recerca: per captar recursos, per generar idees, per prioritzar recerca, per ser part de l’equip de recerca, entre d’altres.

I més específicament, s’han proposat acciones que ajudin a desenvolupar una participació del pacient en recerca que aporti valor:

  • Donar a conèixer als pacients la recerca que es fa en les institucions; és a dir, apropar la recerca a la ciutadania
  • Habilitats comunicatives de l’investigador vers el públic no científic
  • Canals de comunicació efectius entre pacients i investigadors ja sigui a través del teixit associatiu, o amb altres activitats o mitjans de comunicació, jornades amb pacients…
  • Un suport per a tots aquells que s’involucren en la participació: de capacitació, de temps, de recursos, entre investigadors, amb una guia.
  • Grups de treball estables que incloguin la participació de diferents perfils (investigadors bàsics i clínics, assistencials, gestors i pacients) per tal d’identificar necessitats, treure idees, donar lloc a propostes, per exemple.

En resum, s’han de buscar les sinergies entre els pacients i els investigadors en aquells casos on es pugui aportar valor. Un camí que no sempre és senzill ni fàcil, però que té tot el sentit.

Entrada elaborada per Maite Solans Domènech.

Turismo médico

17 Ene
Joan MV Pons

Los que han visto la película británica «El exótico hotel Marigold” (2012) recordarán que una de las protagonistas, una anciana cascarrabias que después, gracias a sus habilidades contables salva el hotel, se va a la India para poder ser operada más rápidamente de una artroplastia, no recuerdo si de cadera o de rodilla. Constituye un ejemplo más de lo que se conoce como turismo médico, desplazarse a otro país para encontrar un servicio sanitario que se necesita y de una forma más rápida o barata.

Barcelona es un foco de atracción en el turismo sanitario y diferentes clínicas y hospitales de la ciudad se publicitan, en una mezcla de intereses de hoteleros y de profesionales de prestigio, a través del Barcelona Medical Center y la Barcelona Medical Agency. La misma Agencia Catalana de Turismo lo incluye como un valor. No hace mucho tiempo, cuando habían dudas sobre si los tratamientos con antivirales de acción directa para tratar los infectados con el virus de la hepatitis C llegarían a todos los afectados, algún país listo como Egipto, donde el turismo ha caído mucho por varias razones que no escapan a nadie, anunciaba que por 5.900-8.000 € uno podía pasar una semana en el país, dar una vuelta por las pirámides y, a la vez, recibir el tratamiento. Cabe decir que en Egipto, por la alta prevalencia de hepatitis C, tienen mucha experiencia y los encantos turísticos, más si añadimos un tour por el Nilo, son indiscutibles.

Con todo esto del turismo sanitario no estamos diciendo nada nuevo, ya en la época de los griegos algunos templos de Asclepio tenían más llamada que otros. Es un fenómeno que hace bastantes años que va en aumento, aunque como sucede en otros tipos de comercio se ve afectado por las recesiones económicas. Se habla de un turismo médico sensible a la calidad y otro más sensible al precio, predominando en el primero la gente acomodada y en el segundo la clase media. No parece que haya ningún país proteccionista en este ámbito, por el contrario, constituye un tipo de importación (personas que vienen buscando el servicio sanitario con una estancia corta pero fácilmente extensiva a largo plazo con los pensionistas que vienen a fundirse los últimos años con sol y playa) y que casi se puede considerar como una forma de inversión extranjera.

Hay países que en esto del turismo sanitario, siguiendo las recomendaciones de Adam Smith, se han especializado. Barcelona es conocida por sus centros oftalmológicos, cirugía digestiva, trasplante y clínicas de reproducción asistida. Por lo que refiere al trasplante, todo el mundo sabe que el comercio con órganos humanos está prohibido, pero nadie duda que en algunos países se lleva a cabo. Sobre la reproducción asistida, la mayor o menor atracción de un país viene muy determinada por el grado de permisividad en su legislación y, como en otro tipo de turismo sanitario, por los precios. Este tema legal se pone especialmente de manifiesto en lo que se conoce como maternidad subrogada o vientres de alquiler. Se dice que esta “industria” en concreto, donde puede diferenciarse la subrogación gestacional (de embriones generados in vitro) y la tradicional (solamente inseminación artificial) llega a mover unos 6 mil millones de dólares anualmente y la India es uno de los grandes focos. Ni que decir que tanto en la reproducción asistida como en el trasplante hay cuestiones éticas importantes.

Uno puede encontrar, además de lo que se ha venido refiriendo, un amplio abanico de servicios fuera: cirugía cardíaca, bariátrica, plástica, de todo tipo, incluída la más tradicional cura de balnearios en lugares seleccionados (¿quién no recuerda «La montaña mágica» de Thomas Mann?). Para aquellos que ven el mundo como una fuente potencial de negocio, el turismo médico puede constituir una gran inversión y si se mantienen las tendencias actuales todavía crecerá más en el futuro. Es también un campo de comercio extremadamente  competitivo, especialmente en precios, como muestra una comparativa internacional de tarifas.

Entrada elaborada por Joan MV Pons.

Blog AQuAS Awards 2018

10 Ene

Hoy hacemos público el ganador del Blog AQuAS Awards 2018 que reconoce el post con más lecturas del año.

En esta edición, el premio se debatía entre cinco posts finalistas: Ferran Barbé, Olga Martínez, Xavier Mora, Núria Radó, Angelina González, Dolores Ruiz y Dolors Benítez.

El ganador ha sido Ferran Barbé con el siguiente post:

¡Muchas felicidades, Ferran!

Empezamos el año…

3 Ene

Empezamos el año dando las gracias a todas las personas que han colaborado en el blog AQuAS en el 2018: Ferran Barbé, Olga Martínez, Xavier Mora, Cari Almazán, Gaietà Permanyer, Dolors Benítez, Clàudia Pardo, Francesca Moya, Iria Caamiña, Núria Radó Trilla, Núria Cuxart, Glòria Novel, Jordi Varela, Ernest Abadal, Marta Millaret, Núria Rodríguez-Valiente, Marc Fortes, Mercè Salvat, Anna García-Altés, Marcel Olivé Elias, Jean Patrick Mathieu, Enric Limon, Gonçalo de Carvalho, Alícia Avila, Elisa Poses Ferrer, Ion Arrizabalaga, Joan MV Pons, Joan Escarrabill, Felip Miralles, Montse Moharra, Lina Masana, Mireia Espallargues, Xavier Bonfill, Marta Gorgues, Gemma Cabré, Jorge Arias, Johanna Caro Mendivelso, Kayla Smith, Angelina González Viana, Dolores Ruiz Muñoz y Ramon Maspons.

¡Muchas gracias a todos!