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14 Ene
LluísBohígas
Lluís Bohigas (@bohigasl), economista

Siempre que se describe el sistema sanitario español, se concluye que lo integran diecisiete sistemas sanitarios distintos. La verdad es que no son demasiado distintos, porque todos tienen el mismo pasado y las mismas reglas heredadas del Instituto Nacional de Previsión (INP), pero el discurso de la diversidad (siempre excesiva) complace a los partidarios de la nueva centralización. Sin embargo, hay un gran número de españoles que no recibe asistencia sanitaria de ninguno de los diecisiete sistemas autonómicos; forman parte del que he bautizado como 18 sistema. El 18 sistema está formado por unos dos millones de españoles que son beneficiarios de MUFACE, ISFAS Y MUJEJU; es decir, los altos funcionarios del Estado, los militares, los jueces y sus familias. Estos eligen cada año dónde quieren ser atendidos, bien en una comunidad autónoma, bien por una aseguradora privada.

Este 18 sistema es mayor que muchas comunidades autónomas, en realidad es similar en población al País Vasco, y no está transferido a las comunidades autónomas, sino que sigue siendo gestionado por el Estado. Ignoramos todos los datos sanitarios de esta población: morbilidad, infecciones, uso sanitario, etc. Tampoco tienen tarjeta sanitaria, ni historia clínica electrónica, ni utilizan la receta electrónica. El 18 sistema —pese a ser responsabilidad del Estado— no dispone de lo que el Estado solicita a las comunidades autónomas. La cartera de servicios es similar a la de la población cubierta por el SNS, pero con diferencias en los copagos, aunque estas diferencias no han sido consideradas nunca como desigualdades. Es habitual que un beneficiario de este 18 sistema pase a ser atendido por la comunidad autónoma cuando necesita una intervención sanitaria muy costosa y normalmente estos beneficiarios prefieren el servicio del SNS cuando se jubilan y utilizan con mayor frecuencia los servicios sanitarios. Cuando el beneficiario de MUFACE usa el sistema sanitario de una comunidad autónoma, el Estado se ahorra el coste.

El 18 sistema está formado exclusivamente por funcionarios públicos quienes, a pesar de toda la polémica antiprivada que se ha desatado, prefieren la atención privada. El 18 sistema se ha ahorrado los recortes sanitarios que hemos sufrido los que recibimos servicios sanitarios de las comunidades autónomas. Puede que sean los miembros del 18 sistema los que han decidido los recortes que se aplicarían a la sanidad pública, puesto que es más que probable que la mayoría del Consejo de Ministros esté integrado por asegurados de MUFACE.

 

2 respuestas a «17 más 1»

  1. Lluís, Está muy bien visto lo que señalas en tu post. Se da la circunstancia de que esos que pueden optar entre dos sistemas son los que cocinan las normas para que el resto de los ciudadanos no podamos elegir como hacen ellos. Otro asunto para nota es el hecho de que los maestros y profesores (funcionarios públicos) que, cuando toca, forman las “mareas” en defensa de la enseñanza pública pertenecen en más de un 90% a MUFACE (tengo los datos): no hay nada mejor que predicar con el ejemplo. José Luis Puerta

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